
“Es imposible reflejar fuera lo que no tenemos dentro”.
Muchas veces nos pasamos la vida rechazando nuestro cuerpo, nuestra apariencia física, luchando con nuestro peso.
Si realmente hacer una dieta y aumentar la actividad física fuera la solución, ¿por qué entonces no lo hemos conseguido? O incluso, ¿por qué cada vez nos sentimos peor?
Muchas veces olvidamos que somos más que un cuerpo. Somos un complemento entre cuerpo, mente y alma, con lo cual, aunque creamos que nuestro problema es el peso, realmente el peso nunca es la causa verdadera, sino el síntoma con el cual se nos está mostrando que en nuestro interior hay heridas que sanar.
Cada vez que queremos hacer cambios, si estamos desde la energía del rechazo, la obligación y el sacrificio, no nos va a funcionar, porque es como trabajar en una empresa donde el jefe presiona constantemente de manera negativa a su equipo, diciéndole lo mal que trabajan, lo incompetentes que son y que no valen para nada. ¿Quién soportaría o estaría bien bajo esa presión?
Lo mismo pasa con nuestro cuerpo, el cual tiene un metabolismo emocional que no responde a estímulos negativos, entonces, si constantemente le estamos demostrando cuánto lo rechazamos y lo poco que lo queremos y valoramos, no nos va a responder.
Si por el contrario, comenzamos a hacer los cambios desde el amor y el respeto a nosotros mismos, este metabolismo emocional se activa y el descenso de peso se vuelve inevitable, ya que no necesitamos esa grasa para seguir protegiéndonos, no de los demás ni de nosotros mismos, ya que muchas veces, somos los que peor nos tratamos.
La base de la terapia cognitiva conductual dice que según como pensamos, sentimos, según como sentimos actuamos y según como actuamos obtenemos nuestros resultados, con lo cual, si sólo nos enfocamos en dietas y ejercicio, estaremos actuando en el nivel de la acción, obteniendo resultados a corto plazo. Si realmente queremos cambiar es necesario irnos a la base, es decir, nuestros pensamientos y emociones.
¿Qué piensas de ti? ¿Qué auto-imagen tienes? ¿Cómo te hablas? ¿Cómo te sientes contigo mismo?
El que no hayas logrado bajar de peso en años y sentirte a gusto con tu cuerpo, no quiere decir que tengas un problema o que te falte algo, simplemente quiere decir que quizás aún no encuentras la forma de liberarte del peso que te sobra, ya que gran parte de ese peso puede ser emocional, con lo cual es importante comenzar a trabajar desde tu interior para comenzar a reflejarlo en tu exterior.
Esta es una de las bases de la filosofía de nutrición emocional, y funciona, porque todo en nuestra vida tiene una razón de ser y cuando descubres los mensajes que se esconden tras tu peso y relación con la comida, te darás cuenta que tenían un sentido y que ha sido necesario para ayudarte a crecer y avanzar.
Confía en las pruebas que te pone la vida, tu cuerpo no es tu enemigo, sino un medio por el cual se te está mostrando que hay temas en tu interior que requieren de tu atención. Cuando resuelvas lo que necesites resolver, ya verás cómo el peso demás comienza a desaparecer, sin mayor esfuerzo.
¡Bienvenida al mundo de la nutrición emocional!
Para seguir indagando en estos temas, te invito a descargar este ebook gratis con “Los 7 Secretos para bajar de peso” (te adelanto que no tienen nada que ver con la comida) y, por favor, escríbenos a ver qué te parecen.
Un abrazo,
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María Luisa
Posted at 08:46h, 24 marzoMUCHAS GRACIAS POR EL LIBRO
Silvia
Posted at 08:34h, 28 marzoMuy bueno . Bien claro expresado . Felicitaciones
Escuela de Nutrición Emocional
Posted at 12:12h, 04 junio¡Muchas gracias! Nos alegramos de que te haya gustado 🙂